Los conceptos erroneos de Astarita (segunda parte)
En la primera parte se sostuvo que Astarita confundía objetivación
con expresión del valor. La diferencia entre estos dos términos no es menor, si
se acepta que la mercancía lienzo objetiva su valor en la chaqueta el valor no
pertenece al lienzo y no existe fuera de esa relación.
En cambio, si se objetiva en el lienzo tiene existencia
previa y se expresa en la chaqueta en la medida que es una mercancía producida
por productores privados independientes para el intercambio. La expresión en la
chaqueta (dinero oro) es su valor de cambio, su precio.
Astarita extiende esta manera de ver la objetivación a la página
89 de El Capital (siglo XXI) donde Marx establece las condiciones históricas de
una división del trabajo desarrollada por productores privados independientes
en la que el intercambio es la manera en que los trabajos privados sean parte
del trabajo social y nuevamente lee esos párrafos como indicando que deben
intercambiarse de manera efectiva para ser parte del trabajo social.
Contrariamente no lo serían.
Para demostrar esto Astarita cita dos párrafos
de El Capital pág. 89
“Es solo en su intercambio donde
los productos del trabajo adquieren
una objetividad de valor,
socialmente uniforme, separada de su objetividad de uso, sensorialmente
diversa” (p. 89, edición Siglo XXI). Y poco antes:
“... de hecho, los trabajos privados no alcanzan realidad como partes del trabajo social
en su conjunto, sino por medio de las relaciones
que el intercambio establece entre
los productos del trabajo y,
a través de los mismos, entre los productores” (énfasis añadido).
“Repito: los trabajos privados alcanzan
realidad como partes del trabajo social (y valor es trabajo social, objetivado) “solo por medio de las relaciones de
intercambio
Astarita nuevamente mezcla conceptos ya que estos dos párrafos
no se refieren a la concreción del intercambio, a la venta, sino a las
condiciones generales del sistema de intercambio entre productores privados
independientes. No dice que el cambio debe concretarse sino cuales son las
condiciones generales del sistema.
El primer párrafo
“Es solo en su intercambio donde
los productos del trabajo adquieren
una objetividad de valor,
socialmente uniforme, separada de su objetividad de uso, sensorialmente
diversa” (p. 89, edición Siglo XXI).
dice que cuando rige el intercambio
entre productores privados independientes los productos del trabajo son mercancías,
valor de uso y valor, trabajo concreto y trabajo abstracto. El trabajo concreto se objetiva en un
valor de uso, la tela, por ejemplo, y el trabajo abstracto, el coagulo de
trabajo humano abstracto que constituye el valor, se objetiva como valor en el
mismo valor de uso, pero separado de su objetividad como valor de uso.
Simplemente, cuando rige el intercambio
los productos se transforman en mercancías desde el momento mismo de la producción,
y no que para ser mercancías lo hacen en el acto de intercambio, en el momento
mismo del intercambio.
Por eso, cuando rige (no cuando se efectua) el intercambio los
productos se transforman en mercancías, “adquieren una objetividad de valor
socialmente uniforme, separada de su objetividad de uso, sensorialmente
diversa”
Si no rige el intercambio como modo de
relacion entre productores los productos no se transforman en mercancías como
cosa general (salvo en mercados localizados en la edad media o el intercambio
aleatorio en sociedades más antiguas).
Si se leen los párrafos completos sin sacarlos de su
contexto en las paginas 89-90, en lugar de extraer frases sueltas esto se
aclara totalmente.
El segundo parrafo
“... de hecho, los trabajos privados no
alcanzan realidad como partes del trabajo social
en su conjunto, sino por medio de las relaciones
que el intercambio establece entre
los productos del trabajo y,
a través de los mismos, entre los productores” (énfasis añadido).
expresa la condición para para que los
trabajos privados puedan ser parte del trabajo de la sociedad, que alcancen
realidad como partes del trabajo social, lo hacen a través de las relaciones de
intercambio. Nuevamente habla de las condiciones histórico-sociales en las que
el trabajo de la sociedad es realizado por productores privados independientes,
entonces para que sean parte del trabajo social la única manera que tienen de
hacerlo es a través del intercambio.
Nuevamente no dice que tiene que ser
intercambiado efectivamente para ser valor como sostiene Astarita.
Mas aun en
su contestación a Erec continua
“El valor del producto no
existe como valor al margen o por fuera de la venta. Por eso, si la venta
fracasa, el valor no se realiza. No queda guardado en algún lugar. No es un “en
sí”.
Astarita insiste en la necesidad de la enajenación para que el
valor “adquiera existencia”
Esto significa que no existe, como valor, al margen de esa
enajenación. Dicho de otro modo: si el bien es producto del trabajo individual,
y el valor es trabajo social. el valor no puede existir previamente a la
relación social de la mercancía tela con la mercancía chaqueta. Por eso la
enajenación afecta al contenido. Por eso si fracasa la venta no hay valor
(decimos “la mercancía no vale nada”, a pesar de que sabemos que se invirtió
trabajo en ella.”
Si esto es como dice Astarita la teoría del valor se transformaría
en algo subjetivo totalmente. Es el típico enfoque circulacionista. Pero el
valor no se define en el mercado sino en la producción y su existencia es
previa, ya que las mercancías van al mercado con precios fijados previamente.
Astarita pretende extender el análisis del Capítulo 1 de El
Capital en el que se estudia el origen del valor de cambio, del precio, a un
nivel de abstracción alto, al análisis de las relaciones de intercambio. Otro
tanto ocurre con el famoso salto de la mercancía que está en la Contribución…
que también es parte del estudio del precio y el dinero, para bajarlo al análisis
del intercambio cuando las mercancías ya van con precios que representan sus
valores al mercado. Lo único que sucede en el mercado es que puede variar la
magnitud del precio pero no la existencia de la masa de valor social, alterando
solo su distribución (salvo que haya una crisis general del sistema y se
produzca ahí la desvalorización de las mercancías).
Y luego Astarita cierra con un ejemplo
Y este es el “salto mortal”
de la mercancía, como ya Marx había señalado en la Contribución... y recuerda en El Capital (p. 129).
De manera que en el mercado el productor de los
20 metros de tela se encontrará con precios (el lenguaje de las mercancías) que se le
impondrán, al margen de sus deseos, de forma objetiva. Repito y subrayo: no basta con
equiparar mentalmente la forma relativa a la forma equivalente. Para que el trabajo privado se objetive como valor, o sea, como
trabajo social, la mercancía debe venderse. Por eso Marx dice que la mercancía adquiere una
objetividad de valor en el mercado. No dice que el valor se genera en el mercado, sino
que en este la mercancía adquiere la
objetividad de valor. De ahí también la importancia de la forma del valor. Es que el contenido
del valor, trabajo social objetivado, no puede existir sin la forma del valor, sin su expresión
(el contenido no es un “en sí”). Por eso, el trabajo adquiere expresión dineraria en el
precio, y la objetivación del valor solo existe bajo la forma del precio al que se
vende la mercancía.”
En primer lugar, se debe
aclarar que las mercancías van al mercado con precios, es decir que ya expresaron
su valor en el precio, en el dinero. De tal forma que deben
poder cambiarse por dinero para que el productor satisfaga sus necesidades por
medio de otro valor de uso porque para el productor su mercancía solo cuenta
como valor de cambio.
En este sentido que dice
Marx sobre el salto mortal de la mercancía aclara mas el tema
1. Lo que dice El Capital (pag 129-132) sobre la venta de la
mercancia
Marx comienza citando el famoso salto mortal de la mercancía que
si no se realiza el que tiene problemas es su poseedor porque para él es un valor
de cambio, que para obtener dinero necesita ser un valor de uso para
el poseedor del dinero, lo que implica dos cosas: 1.que sea socialmente util
lo que implica ser un eslabon de la division social del trabajo que
satisfaga una necesidad social. 2. Que otros tejedores no hayan satisfecho la necesidad social, porque si es así
su producto se volverá inútil, excesivo.
Suponiendo que no sea asi, que su producto es útil el tema es cuánto
dinero atrae, ya figura en su precio siempre y cuando haya usado el tiempo
de trabajo socialmente necesario.
El precio es la denominación dineraria del trabajo social
objetivado en ella, en la mercancía, el lienzo (ver parrafo final pag 130).
Pero si va al mercado y cambio el tiempo de trabajo socialmente
necesario por causas técnicas o por sus competidores, el precio va a ser menor
que el calculado por el productor de lienzo
Continua Marx el análisis suponiendo que todos los productores
emplearon el tiempo socialmente necesario, pero pese a eso puede pasar que el
total de la producción de lienzo supere la necesidad social, la demanda
efectiva. Como son productores privados independientes su oferta supero a la
demanda.
¿Qué sucede? El precio baja y es como si los tejedores hubieran
empleado más tiempo de trabajo que el socialmente necesario, porque en el
mercado todo el lienzo cuenta como articulo único y cada parte como una parte alícuota.
En realidad, cada unidad de lienzo cuenta como la concreción material de la
misma cantidad socialmente determinada de trabajo humano homogéneo. Los poseedores de mercancías descubren que la división del
trabajo los convirtió en
productores privados independientes La división del trabajo convierte en mercancías
los productos del trabajo y hace necesaria su transformación en dinero, pero al
mismo tiempo no garantiza que esto suceda.
Según Marx
“Si la mercancía no es invendible, siempre se opera el cambio de
forma de la misma, por más que apartándose de la norma, en ese cambio formal
pueda haberse perdido o agregado sustancia, esto es, magnitud de valor” pag 132
Es decir, los valores de uso se realizan a precios mayores o
menores que su norma. Cuál es esa norma ? El precio de mercado que aquí
se supone es el precio directo (su valor).
Análisis del caso del productor y el comprador individual.
A partir del análisis de Marx, anterior y el que aparece en El Capital,
págs. 191-202, analicemos que pasa en el caso de un productor individual que se
enfrenta al comprador. Suponemos además que vende a un precio directo, es decir
un valor transformado en precio, ya que las mercancías van al mercado con
precio en dinero.
La mercancía del productor se realizó en el tiempo socialmente
necesario y es un producto útil, pero como las condiciones del mercado
cambiaron, el productor se ve forzado a vender a un precio menor. No realizo la
totalidad del valor sino parte. Que sucede con el resto de sus horas de
trabajo, Astarita diría que son inútiles y se pierden.
Pero si se mira el caso más de cerca se verá que del otro lado hay
un comprador que posee dinero oro, cuyo valor suponemos constante y que pensaba
comprar el producto al precio vigente antes de que la oferta excesiva lo
hiciera bajar. Este comprador se ve beneficiado por dicha baja y el dinero oro
que se ahorra equivale al valor que perdió el vendedor.
Lo que sucede en este caso es que lo que cambio no es el valor
total, el total del trabajo social, sino su distribución entre el vendedor y el
comprador. Las horas de trabajo perdidas por el vendedor son horas de trabajo
ganadas por el comprador.
Si como vendedor el productor pierde o gana valor, el comprador
gana o pierde valor. Lo que es un salto mortal para el vendedor si no puede
obtener parte del dinero, del valor, de la mercancía, es para el comprador
perdida o beneficio según la oscilación del precio de mercado en torno al
precio directo (o al precio de producción si en lugar de productores simples
consideramos capitalistas que emplean trabajadores).
Como valor de uso la mercancía siempre se vende a un precio mayor
a cero, (con la excepción de las crisis más generales donde se puede producir
una falta de venta o desvalorización de las mercancías y la perdida de trabajo
social), o sea se realiza como valor de
uso, lo que varía es en manos de quien queda el valor, es decir cómo se
distribuye el trabajos social o, en el caso de capitalistas, la plusvalía.
Para el vendedor fue un salto realmente mortal, pero para el
comprador un salto de alegría.
Por que se considera que el concepto de valor contenido en la
mercancía es ahistórico, Ricardiano.
Según Astarita es por la forma en que Ricardo considera al mercado
y porque si tomamos solamente el valor como contenido en la mercancía sería un
en si lo que lo haría ricardiano.
Sin embargo, el aplicar como criterio que el valor no es
contenido, perteneciente, objetivado en la mercancía porque es un “en si” no es
suficiente para validar la crítica.
La manera de ver al trabajo por parte de Marx es totalmente
diferente que la de Ricardo. Para Marx el trabajo abstracto, al coagulo de
trabajo, es un concepto que no está en Ricardo ni la concepción clave del valor
de la fuerza de trabajo en lugar del trabajo.
¿Cuál es la prueba de que
el enfoque que sostiene que el valor se produce antes y se realiza después en
la circulación, que es un contenido de la mercancía, es erróneo más allá de la
consideración filosófica hegeliana? Alcanza con poner unas cuantas citas de
Marx para probar algo o hace falta un análisis teórico donde se muestre cómo
encaja la forma valor en el conjunto de El Capital y no tomar algunos capítulos
del tomo primero y extenderlo al resto del análisis.
Kliman (y Carchedi también) cuestiona precisamente este punto porque el enfoque de la
forma valor desconoce la temporalidad del proceso de producción y circulación.
Kliman cita dos ejemplos de cómo Marx en su análisis posterior una
vez desarrollada la forma precio, la utiliza en la crítica de la teoría
cuantitativa del dinero y para mostrar que la ganancia, la plusvalía, no surge
del intercambio.
En los dos casos citados Marx presupone que el valor está
determinado previamente a la circulación y representado en el precio de la
mercancía, es decir que es preexistente a la circulación
Un ejemplo que cita Kliman es el de la crítica a la teoría
cuantitativa, donde Marx afirma
"Que, a
la inversa, los precios de las mercancías están determinados
por la masa de los medios de circulación, y a su
vez dicha masa por la del material dinerario disponible en un
país,79 es una ilusión que deriva, en sus expositores originarios,
de la hipótesis disparatada según la
cual al proceso
de circulación entran mercancías sin precio y dinero sin
valor, intercambiándose
allí una parte alícuota
del conglomerado
mercantil por una parte alícuota del amontonamiento metálico."80 (tomo 1, pág.
150-151)
Y el otro se refiere al análisis del intercambio donde Marx niega
la posibilidad de la generación de la plusvalía en el mismo.
No
ocurre lo mismo con el valor de cambio. “Un hombre que
posee mucho vino y poco trigo comercia con otro hombre
que dispone de mucho trigo y poco vino: entre ambos
se efectúa un intercambio de un valor de cincuenta en
trigo por cincuenta en vino. Este intercambio no significa acrecentamiento
del valor de cambio ni
para el primero ni
para el segundo, pues cada uno de los dos poseía, antes
del intercambio, un valor igual al que se ha procurado por
ese medio.” 15 No se modifica este resultado por el hecho
de que el dinero, en cuanto medio de circulación, se
interponga entre las mercancías, disociándose
así de manera
tangible los actos de la compra y de la venta.1“El valor
de las mercancías está representado
en sus preciosantes
de que entren a la circulación; es, por ende, supuesto y no
resultado de los mismos.17 ( tomo 1 pag192)
Un
problema serio del análisis de la forma-valor es el que detecta Kliman
a partir de la indeterminación de los precios si estos
se fijan en el mercado como lleva el análisis de la forma
valor a suponer, ya que la única
manera de validar el valor es que se cambie según los teóricos
de la forma valor, se pone en cuestión de dónde
surge la plusvalía, porque si el valor no se define hasta la
circulación, la venta, el valor que se genera en la
producción pasa a ser relativo y con esto la existencia o
no de la plusvalía, además de la indeterminación de
los precios.
Respecto
a esto último, Shaikh analiza el problema de la
transformación de valores en precios sosteniendo que el valor
es directamente precio directo, ya que las mercancías van
al mercado con precios: A su vez en la circulación se realiza la distribución de
la plusvalía entre los capitales en
virtud de la competencia entre ellos para obtener la máxima
tasa de ganancia. Esto da lugar a que se generen transferencias de valor entre
las ramas productivas en virtud del movimiento de los capitales en búsqueda
del máximo beneficio. Esta distribución del
plusvalor da lugar a los precios de producción que serían los
precios a los que se tiende en virtud de la igualación de
las tasas de ganancia.
Los
precios de mercado giran en torno a los precios de producción en función de
la oferta y la demanda en el mercado.
Los
precios directos (o valores) rigen a los precios de producción y
estos a los precios de mercado. Las alteraciones del valor provocan
alteraciones en los precios de producción y por consiguiente en los
de mercado.
Debido
a esto el valor generado en una rama puede o no ser realizado en la misma y por
consiguiente, hablar de la realización del valor o de la forma
valor carece de sentido, es restringir el los tres tomos de El Capital, a tres
capítulos del tomo 1. Por lo general el valor
generado por un productor difícilmente o casi nunca será
realizado por el mismo.
Por último,
si bien el problema de la realización de la mercancía es
importante, el análisis de la forma-valor lo desplaza hacia la
esfera de la circulación, viendo la crisis como un problema de
realización acercándose a las tesis de brecha
de demanda en lugar de considerar la raíz de la crisis, que se
encuentra en la tendencia descendente de la tasa de ganancia, lo que desplaza el
problema de la órbita de la producción
hacia la de la circulación.
Negar
la tendencia descendente de la tasa de ganancia implica negar que el
crecimiento de la composición orgánica
del capital está en la base de las crisis, y por consiguiente
restar el rol que cumple el desarrollo de las fuerzas productivas desplazando
los problemas hacia las relaciones de producción.
Este
es el problema de fondo que busca cuestionar la forma valor, el supuesto mecanicismo
que derivaría de conceder a la producción un
rol determinante en el desarrollo de las crisis desplazándolo
a la realización.
De ahí que
los teóricos de la forma valor descartan la existencia
de tendencias inherentes al sistema que llevan a su superación, a
su destrucción. Por ello, Astarita vuelve a validar el
teorema de Okishio, largamente refutado, a negar la ley de la tendencia descendente
de la tasa de ganancia y a considerar las crisis como eventos separados y que no encajan
en ella.
Algunos
textos utilizados para hacer este trabajo
Astarita, R Polémica sobre trabajo, valor y mercado
Kicillof. Starosta On Materiality and Social Form: A Political Critique of Rubin’s
Value-Form Theory, 2007
Kliman,
Andrew
On Capitalism’s Historical Specificity and Price Determination Comments
on the Value-Form
Paradigm
Marx, El Capital,
Siglo XXI
Carchedi
Behind the Crisis
Shaikh VALOR, ACUMULACION Y CRISIS Ensayos de economia
politica, capitulo 2
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